La historia del rafting no tiene una fecha exacta de comienzo. Son muchas las hipótesis que aseguran sus orígenes y todos ellos cuentan con un grado de veracidad en sus fundamentos.
La primera hipótesis afirma que el rafting es producto de los exploradores, cazadores y pescadores de rápidos que descendían en pequeños botes y balsas por las pendientes acuáticas. Esta actividad se popularizó luego.
Otra hipótesis, un poco más legendaria, nos traslada a las antiguas balsas de troncos de madera atados entre sí en las que un personaje se dejaba deslizar río abajo.
Pero esta hipótesis con tintes de leyenda tiene un origen veraz en los antiguos ‘raiders’ o balseros que descendían río abajo sobre el tronco de un árbol propulsados únicamente por la corriente del agua. Los ‘raiders’ comenzaron a practicar esta metodología para transportar los árboles que eran talados hasta las serrerías.
Historia del rafting moderno
La historia del rafting moderno comenzará cuando la actividad se convierte en una actividad apta para todo el mundo y como una recreación para los tiempos libres.
Finalizada la 2ª Guerra Mundial los botes inflables con forma de canasta que habían sido diseñados para realizar ataques sorpresa en el océano se comenzaron a utilizar en los ríos rápidos para recrearse en el tiempo libre.
La popularidad del rafting llegó en la década de 1950.
Con el desarrollo y reconocimiento mundial de la actividad llegaron los años 70´. Sería una década clave en la historia del rafting, era incluido por primera vez en los Juegos Olímpicos, en Munich 1972.